Mientras hay esperanza, hay vida

Este volumen ofrece dos obras de la autora que ya han contado con el favor del público. En Con el alma aferrada encontramos un drama rural actual, un triángulo amoroso y pasional que al regreso de uno de sus personajes tras treinta años de ausencia hace enfrentarse a todos con un pasado que nunca ha dejado de estar presente. Se entrelazan sus sentimientos con el análisis de una sociedad que intenta avanzar con el estigma de la Guerra Civil y de la postguerra, los odios que perviven. Como una cruel rueda, encontramos tres generaciones, tres hombres, el mismo drama y tres formas completamente diferentes de afrontarlo, de combatir la misma herida: con el amor, con la muerte, con la vida. En Mientras hay esperanza, hay vida, la autora nos plantea qué sucede cuando nos hacemos viejos. ¿Tenemos que renunciar al amor, a la lucha, a la dignidad, a los recuerdos, a los sueños, a la esperanza? Es una obra que incita tanto a la reflexión triste como a la risa, mediante la vida cotidiana de nuestros mayores que sufren por sentirse abandonados, rechazados, inútiles, que sienten que toda su vida no ha servido para nada. Este texto es un canto a la vida, a la ilusión, a la esperanza, un homenaje a nuestros mayores.